Por: Rodrigo Beltrán M.

Tanto en la vida personal y laboral así como en los negocios, es crucial replantearnos constantemente hacia dónde queremos llegar, con quiénes contamos para este fin pero sobre todo el ejecutar lo necesario para llegar a ellos a sabiendas que existirán contratiempos durante este proceso.

Muchos autores han escrito sobre el acrónimo “VUCA” (en inglés) el cual se deriva de Volatilidad, Incertidumbre, Complejidad y Ambigüedad, dicho concepto aplicado a negocios, de forma implícita trata de explicar la constante del mundo actual: el cambio y la resiliencia que debemos de tener para seguir estando vigentes.

A posteriori, el pensar bajo este mindset es un buen facilitador a replantear desde diferentes estrategias, adaptar nuevas metodologías de trabajo, diferentes formas de operar, de pensar, de desafiarnos nosotros mismos y a nuestras organizaciones para sobre todo cambiar paradigma de actuación pero siempre buscando el reinventarnos a nosotros mismos y a nuestras organizaciones.

Por un lado es imprescindible el desafiarnos pero es más contundente si dentro de la ecuación adhieres la motivación necesaria para hacerlo realidad, para ello existe otro concepto que se acuñó hace poco más de 10 años por la profesora Katherine Milkman de la escuela de negocios de Wharton, “The fresh start effect”, el cual se refiere al efecto psicológico del momentum donde la gente se encuentra más motivada a engancharse a proyectos de largo plazo, revaluar sus prioridades y sus objetivos profesionales, por ejemplo posterior a un cumpleaños, inicio de año natural, escolar, nuevos proyectos, etc.

Aunque no existe un momento exacto, preciso o inmejorable para emprender un nuevo comienzo, el paso más importante es empezarlo a hacer AHORA, comienza a sembrar hoy y a regarlo con constancia día a día.